En el 2006, Zippo sacó al mercado su nueva línea de encendedores que funcionan a base de gas butano a diferencia de su clásico combustible, la bencina. Zippo trató de trasladar muchas de las características de sus modelos originales a la nueva línea para no perder su identidad pero realizando los cambios indispensables para el nuevo combustible.
Una de las características por la que los modelos clásicos de Zippo siempre se han destacado, el diseño patentado de su chimenea, que hace del encendedor virtualmente a prueba de viento, fue trasladada a la línea Blu, pero no con esa función práctica sino únicamente decorativa, esta vez no con los agujeros dispuestos de forma distribuida sino en forma de la Z de Zippo.
Otro de los cambios, podría decirse que el más notable, es la forma del encendedor, que pasó de ser el típico diseño rectangular a tener lineas curvas por los lados y onduladas en la tapa. En estos modelos, la única parte extraible es la instalación que contiene la piedra de la chispa que junto con la rueda están separadas del resto del encendedor para facilitar el cambio de la piedra, con el mismo proceso que en los modelos clásicos. Al igual que todo encendedor de gas, estos modelos cuentan con una apertura de plástico en el exterior por la cual puede observase el nivel de gas que contiene. Para cargar de gas estos encendedores Zippo recomienda sea utilizado el que ellos mismo comercializan, y debe hacerse volteándolo y recargarlo por el agujero en el inferior del mismo en esa posición, es decir, con la lata de gas comprimido por encima del encendedor.
En su versión clásica una de sus características típicas del Zippo es que la parte interna del mismo, el insert, puede extraerse y de hecho es la única forma que se tiene para recargarlos de bencina, pero en el caso de esta línea Blu, como ya comentamos, la única pieza extraíble es la que contiene la rueda y piedra que generan la chispa, para extraer el sistema interno, estos nuevos encendedores traen un tornillo especial en la parte inferior, al lado del agujero para recargar el gas, que de ser removido por el usuario deja sin efecto la garantía.
Quien suscribe el presente, no ha tenido buenas experiencias con este tipo de encendedores Zippo, de hecho cuando los tuve en la mano (porque fueron varios) logré encenderlos muy pocas veces. Hay que tener en cuenta que esos intentos fueron realizados a más de 1000 metros sobre el nivel del mar (altura promedio de la ciudad de Caracas), y que esta es una de las razones que Zippo menciona como una posible causa para que estos modelos presenten fallas en su funcionamiento. Esperamos contar con la participación de nuestros lectores para conocer cuales han sido sus experiencias con esta linea de Zippo, y saber si la experiencia comentada se limita a un lote o grupo de encendedores en específico.
